La reforma fiscal para la RENTA de 2015 ha modificado los beneficios fiscales, tanto para arrendatario (inquilino) como para arrendador (propietario). Conozcamos las más relevantes:
1. Para el arrendatario (inquilino)
La deducción estatal por alquiler de una vivienda para uso habitual se ha suprimido, para aquellos que firmaron su contrato a partir del 1 de enero de 2015.
Los arrendatarios que firmaron antes del último día de 2014, siempre y cuando se mantenga en vigor el contrato de arrendamiento y sigan cumpliendo los requisitos de rentas máximas podrán deducirse:
- Un 10,05% de los importes pagados con un límite máximo de 9.040 euros al año para bases imponibles inferiores a 17.707,2 euros.
- Para rentas a partir de ese tope y hasta 24.107,20 euros anuales, la deducción va reduciéndose progresivamente hasta desaparecer cuando se alcanzan esos 24.107,20 euros.
- Para el arrendador (propietarios)
La reducción del 100% que existía para inquilinos menores de 30 años ya no es posible.
Ahora, los arrendadores tan sólo podrán practicar una reducción única del 60% al rendimiento neto por el arrendamiento de vivienda, independientemente de la edad de los inquilinos.
- Intereses de préstamos vinculados a la vivienda
- Tributos que incidan sobre los rendimientos o sobre la vivienda: el IBI, las tasas por limpieza, recogida de basuras, alumbrado, etc., siempre que no tengan carácter sancionador.
- Gastos de formalización del arrendamiento y los de defensa de carácter jurídico.
- Gastos de conservación y reparación (que no incluyen las cantidades destinadas a la ampliación o mejora de la vivienda): Son los efectuados regularmente con la finalidad de mantener el uso normal de los bienes materiales, como el pintado, revoco o arreglo de instalaciones. También los de sustitución de elementos, como instalaciones de calefacción, ascensor, puertas de seguridad u otros.
- Los contratos de seguro (de responsabilidad civil, incendio, robo, rotura de cristales u otros de naturaleza análoga).
- Servicios o suministros (luz, agua, gas, teléfono).
FUENTES Alting y Cinco Días